Pese a las estrategias de los Bancos Centrales alrededor del mundo, la inflación sigue presionando con fuerza las economías y los bolsillos de los consumidores con cifras históricas.
Este miércoles, la Oficina de Estadísticas Nacionales de Reino Unido (ONS, por sus siglas en inglés), informó que el alza del Índice de Precios a los Consumidores en el país se había elevado por sobre lo esperado, alcanzado un 10,1% interanual en julio.
El aumento en los precios de los alimentos fue el que más incidió en esta alza, que lleva a la inflación por sobre los dos dígitos por primera vez desde 1982. El incremento de los valores en productos de panadería, lácteos, carnes y verduras, fueron parte de los productos que más empujaron el alza, la que también se traspasó a los precios de la comida para llevar.
Con respecto a la inflación subyacente - que excluye la energía, alimentos, alcohol y tabaco- también aumentó por sobre las proyecciones de los analistas, alcanzando un 6,4% interanual versus el 5,9% pronosticado para el séptimo mes del año.
De acuerdo a Bloomberg, los economistas son cada vez más pesimistas respecto a una recesión en la economía británica durante los próximos meses dadas las presiones inflacionarias. El Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés), estima que las tasas negativas de crecimiento empezarían en el cuarto trimestre de este año y se prolonguen hasta entrado el 2024.
Asimismo, el BoE estima que la inflación no dará tregua en los próximos meses, anticipando una tasa interanual de 13% para octubre, cuando sean restablecidos los límites a los precios de la energía.