El Departamento de Estudios señaló que la reactivación no se dará en el mediano plazo.
El Departamento de Estudios de Inversiones Security, publicó su informe Panorama Económico Nacional, donde se analizaron las expectativas de recuperación de cara al largo, y mediano plazo.
Mayor Impulso Externo Apoya la Recuperación:
En 2020 el PIB mundial tuvo una caída de 3,5% con un significativo impacto de las restricciones a la movilidad por la emergencia sanitaria.
En este contexto, Inversiones Security explica qué 2020 se puede dividir en dos fases: una primera parte en la cual se recibió el shock -con todas las consecuencias negativas conocidas- lo que gatilló una rápida y significativa respuesta de las autoridades económicas a nivel global. A su vez, esta etapa generó el sustento para la segunda parte, la de la recuperación, una vez que se desarrollaron las vacunas contra el virus. Y en este escenario se prevé un crecimiento de 6% del PIB global en 2021.
En ese sentido, el Departamento de Estudios de Inversiones Security agregó que los mercados financieros reflejan muy bien esta división, ya sea en las bolsas, los precios de las materias primas, incluido el cobre, o la renta fija. En algunos casos, la recuperación ha llevado a los niveles registrados antes de la pandemia y en otros casos muy por sobre ellos.
Capacidad de Reactivación Mejor a lo Esperado:
De acuerdo al informe, en los últimos meses se ha ratificado que la economía chilena tiene una buena capacidad de reactivación, incluso mejor a lo previsto. Ello se refleja en la evolución del Imacec mensual en términos desestacionalizados, el cual ha crecido en promedio 2% mensual entre junio de 2020 y enero de este año.
Mientras que desde la perspectiva de la demanda interna, Inversiones Security cree que este año estará liderado por el consumo privado, el cual comenzó su recuperación a fines de 2020 apoyado por las medidas fiscales y el retiro de fondos previsionales. En tanto, la inversión estaría más contenida debido a la mayor incertidumbre local (elecciones, proceso constituyente), aunque el mayor impulso externo mejoró las perspectivas en el margen.
Asimismo, en el informe se destaca que los índices de confianza de empresarios volvieron a terreno optimista, después de estar más de un año en zona pesimista. En esa línea, consignan que un punto relevante será la mayor inversión pública anticipada, principalmente en infraestructura.
Inversiones Security plantea que, si bien la recuperación está siendo más rápida de lo previsto y el crecimiento sería más elevado en 2021, hay consecuencias de la pandemia que serán más permanentes o que demorarán tiempo en volver a niveles previos.
De acuerdo al informe, el mayor impulso externo que ya recibió la economía chilena y que se mantendría favorable en los próximos trimestres, la prolongación del exitoso proceso de vacunación, la permanencia de los estímulos económicos (monetarios y fiscales) y una baja base de comparación, los hace estimar un alza del PIB de 7% para este año.
De todos modos, esta previsión no considera nuevas disrupciones en los próximos meses por crisis social ni nuevas restricciones a la movilidad. El desafío se ve hacia 2022, año en el cual la inversión seguiría contenida debido a la incertidumbre local, el mercado laboral continuaría dañado y no habría nuevos impulsos externos ni apoyos monetarios ni fiscales. Para el 2022 se estima un alza de 2,5% del PIB.
Para descargar el Informe Portafolios del Departamento de Estudios de Inversiones Security, haz click aquí.
